13 junio 2011
Mínimos imprescindibles
Si no funciona la empatía, que al menos funcione la cortesía. Es mejor simular una relación educada que, en nombre de la sinceridad y la espontaneidad, provocar catástrofes materiales o emocionales. Si no te puedes poner "en la piel del otro", al menos, si es posible, no se la lastimes.