"Derecho: conjunto de principios y normas, expresivos de una idea de justicia y de orden, que regulan las relaciones humanas en toda sociedad y cuya observancia puede ser impuesta de manera coactiva."
Diccionario de la RAE
Muchas veces, el "conjunto de principios y normas que regulan las relaciones humanas" han justificado relaciones de dominación. Por ejemplo, el expansionismo colonial europeo (como todos los colonialismos) se desarrolló respetando unas leyes minuciosamente redactadas (por los conquistadores), que ya de entrada reconocían el derecho de conquista "de las tierras desconocidas". Lo mismo se puede decir de la trata transatlántica de esclavos, practicada respetando el ordenamiento legal vigente en los países promotores y beneficiarios de aquel comercio de personas.
Unos mismos derechos pueden ser moralmente correctos para unas personas pero moralmente inaceptables para otras. En los conflictos entre poderosos y oprimidos, a los primeros no les es difícil elaborar argumentos morales con el fin de justificar los propios privilegios. Porque la moral, por definición, es arbitraria. La ética en principio no. Y por lo tanto, los derechos pueden ser éticamente cuestionados, pasados por el tamiz de la razón. Y entonces se puede llegar a la conclusión que un determinado derecho es más o menos justo o injusto.
29 mayo 2008
28 mayo 2008
Historia de los derechos humanos: principales hitos
La historia de los derechos humanos tiene algunos hitos fundamentales:
-La emergencia de la empatía.
-La creación de normas morales.
-El nacimiento de la ética (la aplicación de la razón sobre la validez de las normas morales).
-La creación de derechos.
-El disfrute de los derechos creados.
A pesar de aparecer secuencialmente, ninguna de las fases ha sido asimilada de forma definitiva. En la actualidad es tan necesario reivindicar las últimas como las primeras:
-La empatía (ante comportamientos de personas o colectivos que actúan sin la menor "compasión" hacia el sufrimiento ajeno).
-El sometimiento de la moral a la ética (ante la reivindicación de normas morales arbitrarias y lesivas de la integridad de las personas, esgrimidas por distintos colectivos religiosos o laicos).
-La creación de derechos como proceso permanente (en la medida que la veloz evolución de la humanidad obliga a afrontar nuevos retos y a revisar la concreción de algunos derechos en función de las nuevas situaciones).
-El disfrute de los derechos (a la vista de que amplios sectores de la población mundial estan muy lejos de gozar no ya de todos los derechos teóricamente consensuados por la comunidad internacional, sino ni tan siquiera de los más elementales, los imprescindibles para llevar una vida mínimamente digna, o sencillamente para sobrevivir).
Además, existe una indudable influencia mutua entre los distintos estadios, una influencia que se plasma en todos los sentidos, no sólo en la secuencial y progresiva que hemos expuesto. Por ejemplo, el acceso a la educación sin duda puede promover la reflexión sobre la secuencia previa (la creación de derechos), así como el acceso a unas condiciones de vida dignas suele facilitar la oposición a las normas morales arbitrarias, etc.
-La emergencia de la empatía.
-La creación de normas morales.
-El nacimiento de la ética (la aplicación de la razón sobre la validez de las normas morales).
-La creación de derechos.
-El disfrute de los derechos creados.
A pesar de aparecer secuencialmente, ninguna de las fases ha sido asimilada de forma definitiva. En la actualidad es tan necesario reivindicar las últimas como las primeras:
-La empatía (ante comportamientos de personas o colectivos que actúan sin la menor "compasión" hacia el sufrimiento ajeno).
-El sometimiento de la moral a la ética (ante la reivindicación de normas morales arbitrarias y lesivas de la integridad de las personas, esgrimidas por distintos colectivos religiosos o laicos).
-La creación de derechos como proceso permanente (en la medida que la veloz evolución de la humanidad obliga a afrontar nuevos retos y a revisar la concreción de algunos derechos en función de las nuevas situaciones).
-El disfrute de los derechos (a la vista de que amplios sectores de la población mundial estan muy lejos de gozar no ya de todos los derechos teóricamente consensuados por la comunidad internacional, sino ni tan siquiera de los más elementales, los imprescindibles para llevar una vida mínimamente digna, o sencillamente para sobrevivir).
Además, existe una indudable influencia mutua entre los distintos estadios, una influencia que se plasma en todos los sentidos, no sólo en la secuencial y progresiva que hemos expuesto. Por ejemplo, el acceso a la educación sin duda puede promover la reflexión sobre la secuencia previa (la creación de derechos), así como el acceso a unas condiciones de vida dignas suele facilitar la oposición a las normas morales arbitrarias, etc.
12 mayo 2008
El derecho a la alimentación
Además de su valor nutritivo, otro de los argumentos de los partidarios del consumo de carne es que "está sabrosa". Partiendo de este argumento, ¿podría ser justificable, en alguna medida, el consumo por ejemplo de carne de niño, ya que sin duda debe ser también nutritiva y sabrosa?
Y si hay argumentos de nivel superior que impiden un planteamiento como el anterior en el caso de las personas, ¿por qué motivo no se plantea esta restricción y su eventual aplicación en el caso de consumo de animales no humanos?
Las distintas opciones alimentarias de las personas que siguen dietas que incluyen o evitan la carne, ¿son sólo meras preferencias gastronómicas o incluyen dimensiones que deberían evaluarse a través de reflexiones éticas?
Y si hay argumentos de nivel superior que impiden un planteamiento como el anterior en el caso de las personas, ¿por qué motivo no se plantea esta restricción y su eventual aplicación en el caso de consumo de animales no humanos?
Las distintas opciones alimentarias de las personas que siguen dietas que incluyen o evitan la carne, ¿son sólo meras preferencias gastronómicas o incluyen dimensiones que deberían evaluarse a través de reflexiones éticas?
05 mayo 2008
Dilemas éticos: el aborto - 2
Si según argumentan algunas personas un óvulo acabado de fecundar es un ser humano, ¿se deben dedicar a salvar todos y cada uno de los óvulos fecundados y congelados los mismos recursos que se deberían dedicar a salvar, por ejemplo, la vida de cualquier niño enfermo?
¿Es igual de grave que "mueran" 15.000 embriones congelados (a causa por ejemplo de un corte de electricidad que afecte a los congeladores donde están almacenados), o que mueran 15.000 niños por falta de atenciones sanitarias básicas?
¿Es igual de grave que "mueran" 15.000 embriones congelados (a causa por ejemplo de un corte de electricidad que afecte a los congeladores donde están almacenados), o que mueran 15.000 niños por falta de atenciones sanitarias básicas?
04 mayo 2008
La felicidad - 4
No sólo nacemos de una determinada manera, también nos autoinventamos a nosotros mismos. Porque algunas características de las personas son innatas, pero otras son modeladas.
Es evidente que a lo largo de la vida nos vamos amueblando (ilusiones, miedos, opiniones, gustos...). Escogemos, rechazamos... Reivindicando nuestra libertad, dibujamos sueños, establecemos necesidades, y luego detalladamente especificamos el umbral deseable de cada una de estas necesidades.
Entonces aprendemos a decir: "Yo soy así". Pero no es exactamente cierto, en parte nos ocultamos la verdad. No obstante, navegando en un océano de equivocaciones a la deriva como la nuestra, sentimos que nuestra afirmación es socialmente coherente.
El camino, además, es largo y laborioso, por lo que al final estamos agotados. El esfuerzo no ha sido ficticio, al contrario. Ha sido un trabajo agotador, constante, de años. Quizás contraproducente y disparatado, pero un verdadero trabajo de titanes (de habernos sido impuesto, de no haberlo elegido libremente, nos habría sido imposible asumirlo).
Puede que el cansancio nos inunde. Y el desconcierto. Nuestras expectativas (esta parte de nuestras invenciones) en ocasiones no se cumplen:
--¿Cómo puede ser que no me entiendan?
--¿Cómo puede ser que no me quieran?
--¿Cómo puede ser que no me respeten?
Nos sentimos profundamente estafados, ofendidos. Doblemente ofendidos, o burlados, si se tercia que se nos recuerda nuestro laborioso trabajo, la lenta construcción de nosotros mismos.
--¡No es verdad! -gritamos- ¡¡¡Yo soy realmente así!!!
De acuerdo, seguramente. Pero quizás es oportuno no olvidar el camino: si hay mucha parte de invención tejida laboriosamente, puestos a inventar... ¿Por qué no nos inventamos ser felices?
Es evidente que a lo largo de la vida nos vamos amueblando (ilusiones, miedos, opiniones, gustos...). Escogemos, rechazamos... Reivindicando nuestra libertad, dibujamos sueños, establecemos necesidades, y luego detalladamente especificamos el umbral deseable de cada una de estas necesidades.
Entonces aprendemos a decir: "Yo soy así". Pero no es exactamente cierto, en parte nos ocultamos la verdad. No obstante, navegando en un océano de equivocaciones a la deriva como la nuestra, sentimos que nuestra afirmación es socialmente coherente.
El camino, además, es largo y laborioso, por lo que al final estamos agotados. El esfuerzo no ha sido ficticio, al contrario. Ha sido un trabajo agotador, constante, de años. Quizás contraproducente y disparatado, pero un verdadero trabajo de titanes (de habernos sido impuesto, de no haberlo elegido libremente, nos habría sido imposible asumirlo).
Puede que el cansancio nos inunde. Y el desconcierto. Nuestras expectativas (esta parte de nuestras invenciones) en ocasiones no se cumplen:
--¿Cómo puede ser que no me entiendan?
--¿Cómo puede ser que no me quieran?
--¿Cómo puede ser que no me respeten?
Nos sentimos profundamente estafados, ofendidos. Doblemente ofendidos, o burlados, si se tercia que se nos recuerda nuestro laborioso trabajo, la lenta construcción de nosotros mismos.
--¡No es verdad! -gritamos- ¡¡¡Yo soy realmente así!!!
De acuerdo, seguramente. Pero quizás es oportuno no olvidar el camino: si hay mucha parte de invención tejida laboriosamente, puestos a inventar... ¿Por qué no nos inventamos ser felices?
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