10 abril 2009

Citas - Francisco Bustelo (origen de las religiones)

"Pese a que pierda terreno conforme avanza el conocimiento, el hecho religioso parece consustancial al ser humano. Su razón de ser principal es aliviar la desazón que suscita a menudo el vivir y sobre todo el morir. Religión ha existido siempre y probablemente apareció con la hominización misma, cuando su incipiente racionalidad hizo que nuestros remotos antepasados buscaran una balbuceante explicación, que sólo podía ser sobrenatural, a una naturaleza misteriosa, tan pronto hostil como propicia, de la que dependía el vivir de cada día y la propia supervivencia de la especie. Las divinidades, tanto masculinas como femeninas, a las que había que predisponer favorablemente para atenuar el desvalimiento humano debieron de ser muchas y muy diversas, con referencia casi siempre a lo más presente: el sol, la luna, la tierra, la lluvia, el rayo, los animales.

"Con el lento progreso comenzó a entenderse mejor el mundo en derredor y surgieron las grandes religiones monoteístas que, a partir de una verdad revelada, intentaron explicar la vida humana como creación de un Sumo Hacedor y un tránsito hacia la vida eterna. Entre sus rasgos figura el que todas fueron y son machistas. Dios en ellas siempre es varón y con su auge ya no hubo diosas, otrora tan numerosas.

"La coexistencia de esas religiones fue casi siempre conflictiva, ya que por definición todas ellas se consideran la única verdadera. La historia está llena, así, de guerras de religión y de aberrantes y criminales pogromos. Pero el progreso se aceleró y entre los avances más notables de la Edad Contemporánea destaca el que empezara a modificarse el papel de la religión en la sociedad. Paulatinamente, se dejó de considerar obligado el tener determinadas creencias. El hecho de que éstas, por así decirlo, se privatizaran ha sido un paso de gigante. Por primera vez en la historia de la humanidad, desde hace poco más de un siglo, en los países más avanzados y desde hace unos decenios en otros más a la zaga como España, cada cual puede creer o no creer lo que quiera y a nadie se le piden cuentas por ello."

Francisco Bustelo. El País, 10-4-2009